CONFINAMIENTO 8

 

Un amigo me decía el otro día que no le gusta el momento y el ambiente social que estamos viviendo, las banderas, las policías y militares, partidos políticos sin capacidad para leer el momento histórico y la necesidad. Una parte de la gente aferrada al odio hacía el gobierno, hacía los que no piensan como ellos, hacía los de fuera. En un sálvese quien pueda del virus. Yo no sé si en los momentos de previos a las guerras y sobre todo guerras civiles el ambiente era similar. Por el contrario, puede que  simplemente vamos asumiendo con evidencia  que los progresos de la civilización donde se alcanzaban libertades, igualdad y consenso en normas de convivencia basados en un interés común y sentimiento colectivo, son más débiles de lo que pensábamos y debemos  pelearlo  sin descanso generación tras generación.  

También me preguntaba  en un mensaje, que están haciendo nuestros  sindicatos de clase ante la situación, no se los oye en este momento. Yo en esta ocasión creo que la respuesta de los sindicatos y en concreto de CCOO y UGT ha sido intensa y acertada. CCOO ha  intervenido y asesorado  solo en Cataluña, por ejemplo,  en los ERTEs de  2.224 empresas que afectan a 333.224 personas trabajadoras, en un 49% del total de trabajadores afectados.  Aún así, seguro que no hemos sabido dar soluciones y atender todas las circunstancias  y sobre todo trasladar que estamos en todos los frentes del COVID19: salud laboral, Epis, seguro de desempleo y ingreso mínimo vital, apoyo a PYMES y Autónomos, etc. Con propuestas y negociaciones. Pero quizás no es momento para que el protagonismo nos lo llevemos los sindicatos, como en las movilizaciones de la transición en los años 70. Pero si la clase trabajadora que es quien está sacando en cada uno de los frentes dando lo mejor que sabemos.

Ahora bien, esto  me hace pensar algunas cosas. Para la generación de la radio y la televisión, con una o dos cadenas, sin redes ni comunicaciones múltiples, más allá de los periódicos, teníamos un acceso a la información menos plural pero mucho más compartida o común, es decir la misma información llegaba a todos por igual. Ahora gracias a los algoritmos de las redes nos encerramos en islas y ambientes informativos.

Por salud mental yo agradezco que no me salga en mis cuentas de Facebook o Twiter mensajes fascistas, que al no interaccionar con ellos él algoritmo me obvia, no así El Corte Inglés  o Amazon que aunque no les pinche nada ahí saltan siempre.  Otros preferís ser “masocas” y leer lo que esas mentes de odio expulsan para comprender que está pasando,  también es necesario.

Está circulando con cierto éxito unos vídeos muy didácticos y recomendables sobre el COVD19 de un médico internista del hospital de Clínico de Llíria (Valencia) Dr. Iván Moreno. Este doctor se cuida mucho de advertir que no tiene adscripción política alguna e intenta no entrar a valorar las medidas toma el gobierno. Sus explicaciones son didácticas y accesibles y sus recomendaciones a las personas claras y responsables. Pero a mí me gustaría que no tuviera que hacer esa advertencia para que se le respetara igual, y no se viera expuesto a una batalla organizada de “boots” contra él, sea ideológicamente conservador o comunista.